animal coming alive.
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café.
viernes, 23 de septiembre de 2011 | 11:06 | 0 comments


Tanteó con sus dedos la lata de café, observándola con una indiscreta indecisión mientras conmemoraba las ya concluidas puestas en escena de la ultima vez que se bebió cuatro preciosas tazas de aquel distinguible brebaje. La única insignificante conclusión que se había procreado en aquella fecha era que aquella clase de néctar solía obsequiarle nada más que problemas. Pero bien que el bello aroma le chillaba desaforadamente auxilio y probablemente no se detendría hasta que el modesto joven cayera en sus redes. Por más desestimable que logre lucir la situación, era una cuestión de colocarse en sus zapatos. El sucio delito contra su cortes y disciplinada personalidad, ¿que elegir?. Demasiado tarde, el azucarado líquido comenzó a descender por su garganta como una veloz cobra, apoderándose de todo rastro de lógica y concediéndole una excedida felicidad. Se limito a abandonar la duda y arrojar el tazón por los aires, creando un crujido en el suelo que tan solo le provoco carcajadas de despreocupación. Curiosamente, el pecado no le rodeaba. No se trataba de ninguna infracción como lo perseveraba, el desliz no se encontraba en conservar cinco minutos de gloria y bienestar para si mismo. Repiqueteo por la habitación, se echo inconscientemente sobre la alfombra, se coloco de pie nuevamente, se roto unas treinta y dos veces para luego presumirse frente al espejo de su baño. A su conciencia le habían cortado la lengua en pequeños trozos, y la pesadumbre no habitaba en su ser.

Todo era provecho.

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