Me tengo que deshacer de esa fase de mí vida, tengo que terminar de entrar en la etapa en la que estoy viviendo. ¿Cuanto tiempo nos toma dejar el caparazón y entrar en un nuevo mundo al que no estábamos acostumbrados? ¿Cuanto tengo que esperar hasta dejar mí pasado atrás y, finalmente, mirar hacia adelante? Se que va a pasar un largo tiempo, solo espero que algún día sí pase. Es como sí tuviera dos vidas paralelas, una en Capital y otra en Provincia. Cuando estoy acá, soy Mora Arenillas, esa que va al Nacional de San Isidro, que no hizo primer año de secundaria y todavía no termina de encajar, por más que ya tenga sus amigas. Y, cuando estoy allá, soy Tonia, la que estudió en la Scalabrini, tiene el mismo grupo de amigos desde que tiene memoria y siempre se sintió medio superada por todos. Es como sí estuviera dividida, y no quiero elegir entre ninguna de las dos vidas, quiero las dos.

Etiquetas: con lluvia porque esta lloviendo y así, otra confesión sincera